Con motivo de la creciente preocupación por el elevado número de jóvenes desempleados en todo el mundo, el 18 de diciembre de 2014, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), designa el 15 de julio de cada año como el “Día Mundial de las Habilidades de la Juventud”. El objetivo de esta celebración es llamar la atención sobre la necesidad del desarrollo de aptitudes que permitan a los y las jóvenes de hoy hacer una mejor transición al mundo laboral.
La enseñanza y la formación son cruciales para cumplir la Agenda 2030. El derecho a la educación para el 2030 queda plenamente plasmada en el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 4: “Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad, y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos”.
En la Agenda Educación 2030 se presta gran atención a:
• El desarrollo de competencias técnicas y profesionales, específicamente en lo que se refiere al acceso a una enseñanza y formación técnica profesional, asequible y
de calidad
• La adquisición de competencias técnicas y profesionales con miras al empleo
• El trabajo decente y el espíritu empresarial
• La eliminación de las disparidades entre los géneros y la garantía de acceso de las personas vulnerables.
El potencial de la juventud define el presente y el futuro de México. En el 2020 se contabilizaron 32 millones de jóvenes. Son el grupo de edad mayoritario en México.
Una cuarta parte de la población tiene entre 15 y 29 años.
Las personas jóvenes son el presente y el futuro de la nación. Detonar todo su potencial de talento y capacidad productiva es esencial para su bienestar personal y familiar.
Por lo que la incorporación de jóvenes a la vida productiva es factor de competitividad, contribuye a la gobernabilidad e incrementa la cohesión social del país.
Sin embargo, está el contrapunto, la existencia de millones de jóvenes excluidos y sin oportunidades, fuera de la escuela y sin trabajo o con rezago educativo y en trabajos precarios. Esto constituye una violación a sus derechos, un riesgo en sus vidas y un factor de inseguridad, pobreza y desigualdad creciente.
Aún antes de la pandemia del COVID-19 las condiciones del trabajo en México no cumplían con las características del derecho al trabajo digno. Durante la contingencia se agravo aún más la situación. Con datos de los primeros meses (marzo a junio de 2020), sabemos que el desempleo de jóvenes se disparó a 40% en el mes de mayo y los ingresos laborales se redujeron para quienes no perdieron su trabajo durante los meses de confinamiento.
Proyecto Roberto Alonso Espinosa (PRAE) por medio de sus Centros de Desarrollo Comunitario (CDC), ha persistido en mantener el compromiso con las y los jóvenes de las comunidades del municipio de Zacatlán de las Manzanas y de Cuacuila, ambos en el estado de Puebla y Chamontoya en la Alcaldía Álvaro Obregón de la Ciudad de México; dando continuidad a su programa educativo Rehilete, principalmente orientado para estudiantes de nivel secundaria, media superior y superior. Esto a través de las siguientes acciones:
• Programa de apoyo educativo a estudiantes de nivel secundaria y media superior para el desarrollo de habilidades educativas en los campos formativos de lenguaje y comunicación, pensamiento matemático y habilidades socioemocionales. Además,
se incluye un taller de informática educativa, actividades de acondicionamiento físico, visitas educativas a museos y espacios recreativos.
• Curso anual de preparación para estudiantes de tercero de secundaria para la aplicación del examen de selección al nivel medio superior en la Ciudad de México.
• Apoyos económicos, con equipos de cómputo y materiales educativos para estudiantes de nivel de educación básica, media superior y superior
• Talleres educativos sobre sexualidad integral y prevención de la violencia escolar
• Alianza con grupos y organizaciones sociales para el desarrollo y talleres de formación para la inserción laboral, como el programa de formación en hotelería con World Vision.
Proyecto Roberto Alonso Espinosa está comprometido con mejorar las condiciones de acceso a una educación profesional y a opciones de trabajo dignas para las personas jóvenes de México. Es parte vital de nuestro día a día crear mejores futuros por el bien de todos.