En un proceso de desarrollo interdependiente se crean condiciones de bienestar para todos, por lo que el modelo de intervención de Proyecto Roberto Alonso Espinosa (PRAE), a través de los Centros de Desarrollo Comunitario (CDC), busca detonar procesos de organización y participación en las zonas en las que trabaja: sean urbanas, rurales o semirurales. Uno de los CDC se encuentra en una comunidad semirural, en el Barrio de Poxcuatzingo, perteneciente al Municipio de Zacatlán de las Manzanas, en la Sierra Norte de Puebla.
La zona de influencia en el CDC de Zacatlán contempla al Barrio de Poxcuatzingo, 13 barrios y juntas auxiliares del municipio, entre las que destacan Zacatlán Centro, Jicolapa, Ayehualulco, Zacatzingo y Tlatempa, además las colonias Niños Héroes y la Unidad Habitacional Manuel Espinosa Yglesias (UHMEY). En esta unidad habitacional es importante resaltar que la mayor parte de sus habitantes llegaron en 1999, tras las inundaciones ocurridas en la Sierra Norte Poblana en donde muchas familias perdieron sus casas. Por estas razones este asentamiento poblacional fue expresamente creado por la Fundación Amparo para brindar apoyo a las personas que convergen de distintas comunidades de la sierra y que, de manera inesperada, cambiaron sus trayectorias de vida al encontrarse en una colonia de nueva creación, con vecinos de múltiples localidades, costumbres e historias.
En las comunidades semirurales, la densidad poblacional es mucho menor a la de una ciudad, se caracteriza por asentamientos mixtos (población local y foránea). En Poxcuatzingo -y sus alrededores- parte de la población semirural ha crecido en la comunidad, otros pobladores han migrado de zonas más rurales hacia esta región: esto trae consigo múltiples desafíos que implican cambios e intervenciones para asegurar calidad de vida mediante servicios básicos (vivienda, alimentación, educación y salud).
En este mismo sentido, otra característica importante de la población semirural consiste en que sus estrategias de vida se basan en la multiactividad: se combina la actividad agrícola (generalmente para el autoconsumo) con otras relacionadas con el comercio y los servicios, con la finalidad de contar con los medios y recursos suficientes para atender los requerimientos de la vida cotidiana.
Por otro lado, Zacatlán es un Pueblo Mágico, en donde el turismo cada vez gana mayor importancia, transformando las dinámicas económicas y provocando que la cabecera municipal y los barrios aledaños transiten de ser una comunidad semirural a una de mayor urbanización, generando efectos como el abandono del campo, principalmente por las generaciones más jóvenes, quienes ven en las nuevas actividades económicas una mejor oportunidad para mejorar su calidad de vida.
Ante estos desafíos, desde el 2006 el CDC de Zacatlán ha buscado diferentes estrategias para aportar a la generación de mejores condiciones de vida de los habitantes en varios ejes; ya sea a través de la capacitación de las mujeres para formarse como educadoras Montessori que brinden servicios de educación preescolar, primaria y educación no formal para las niñas, niños y adolescentes; o bien los servicios de salud, incluidos nutrición y comedor, para una alimentación balanceada; o el acompañamiento de los agroecólogos del eje de entorno, que comparten estrategias de sobrevivencia enfocadas en una economía solidaria y en lograr la soberanía alimentaria. De esta forma, Proyecto Roberto encuentra muchas razones para seguir compartiendo espacios formativos con la comunidad.
Así la labor del Centro de Desarrollo Comunitario de Zacatlán en el ámbito semirural puede sintentizarse como el esfuerzo por reconciliar lo mejor de dos mundos, lo urbano y lo rural, para generar equilibrios entre las distintas posturas sobre el adecuado camino a construir para el devenir de la sociedad.
También se pretende evitar el crecimiento inarmónico donde lo rural se extinga ante lo urbano y no se le brinde la oportunidad de promover una nueva ciudadanía empoderada para atender su propia noción de éxito social.
Finalmente, en el cumplimiento de su misión institucional, PRAE busca en el mundo semirural tejer redes de colaboración entre los avances tecno-científicos y los requerimientos de sostenibilidad de los entornos semirurales a fin de crear una amalgama cultural única que promueva la igualdad y equidad en derechos, el acceso a la educación y a la salud de calidad, salvaguardando la integridad y el bienestar de la comunidad en su conjunto.